TRABAJO ANUAL DEL 2023
LA MISIÓN MISTICA Y SOCIAL DE CAFH
TABLA 90 DE PATROCINADOS
De Xalapa, Veracruz, México.
Dta. P. María Maricela Vista Ceballos.
Dta. P. Maria Elvira Balderas Cuautle. *
Dlla. P. Gabriela Navarro Guzmán. *
Dlla. P. Luz Elena Peláez García. *
Dlla. P María del Carmen Coello Tovilla.
Dlla. P Carolina Ramírez Palafox. **
Pj. P. Carlos José Camacho Macías.
Pj. P. Daniel lldefonso Vásquez Cardeña.
Pj. P. Miguel Maximiliano Arias Tapia. **
*son compañero que tuvieron que cambiar de tabla por causa de fuerza mayor tuvieron que cambiar de tabla.
** Son compañeros que siguen en la tabla, mas sin embargo están tomando reunión de manera presencial en la ciudad de México.
INTRODUCCIÓN
Cada compañero de la tabla desarrollo una enseñanza, tratando desde la misión mística y social de Cafh, apoyándonos en las enseñanzas;
El Buen Camino (edición 2010), Prácticas del Desenvolvimiento (edición 2019), La Obra de Cafh (edición 2012), El Mensaje de Plenilunio 2023, La Alocución de Apertura 2023, y La Alocución de Clausura 2023.
Es pertinente aclarar que cada hijo escribió estos resúmenes de acuerdo a como cada uno entendió las enseñanzas, sin pretender en ningún momento cambiar el significado de las mismas. Con la humildad necesaria solo para poder entenderlas mejor.
LA MISIÓN MÍSTICA Y SOCIAL DE CAFH
Nuestra aspiración es vivir la grandeza de nuestro ser haciéndonos infinitamente pequeños por amor a la humanidad.
Nuestro anhelo no nos centra en nuestro propio beneficio, en nuestro bienestar, en nuestra comodidad sino en las ofrendas generosas de nosotros mismas que sea una respuesta genuina a la inconsciencia y al dolor que padecen millones de seres humanos.
Solo viviendo en armonía con la Ley de la Renuncia podemos hacer la Egoencia en nosotros y solo así podemos descubrir nuestra misión en este mundo
“La Renuncia es la Ley del mundo futuro y vosotros, Hijos de la Madre, estáis entre los precursores que viven esta Ley que será el modo de vivir de los hombres que vendrán” (Don Santiago mensaje de plenilunio de 1957).
Sin la humildad que implica reconocer la necesidad de esa otra mirada, es difícil avanzar en el desenvolvimiento sin caer en el riesgo del estancamiento o de la soberbia espiritual.
Abracemos íntimamente, profundamente, la vida tal como es. No hay amor sin dolor, alegría sin tristeza, fortaleza sin debilidad. Esto es la Renuncia.
Llamamos Ascética de la Renuncia a la labor sistemática de concientización de los procesos mentales, los sentimientos, la conducta y las decisiones.
Llamamos Mística del Corazón a la concepción de nuestro destino de unión con Dios, a la intención que motiva una conciencia de participación a la actitud y conducta que la expresan.
Dedicando tiempo y amor a escuchar, acompañar y compartir, brindándoles nuestra presencia. De igual manera podemos brindarles nuestra energía a través de la oración.
Ya que orar es un gran don que frente a lo trascendente, al misterio de lo Divino Desconocido, eleva nuestra propia vibración interna y se vuelca en energía espiritual y asistencia para otros.
¿Cómo podemos asegurarnos de que mantenemos claro el rumbo del desenvolvimiento que decimos haber elegido? Evaluando nuestro rumbo y nuestras prioridades.
Las prioridades se pueden distinguir “las primarias”, que básicamente son espontáneas y “las elegidas”, que se fundan especialmente en el discernimiento y la voluntad.
¿Cuál es el sentido de mi vida aquí y ahora?
¿Cuál era el sentido de mi vida antes de entrar a Cafh?
¿Acaso cambió mi rumbo de vida, y en qué forma cambió?
Cafh, como Obra Divina, tiene una misión que cumplir: desarrollar una parte de la mística del futuro, la Mística del Corazón. Esto implica vivir de acuerdo con la Ley de la Renuncia. La Ley de la Renuncia será el modo de vivir de los seres humanos que vendrán.
Hoy la sociedad humana ha ido cambiando aceleradamente en los últimos años: de un carácter sólido, determinista, predecible, de estructuras firmes, de valores y roles claramente establecidos.
Pasamos a una sociedad “líquida” que fluye y que se mueve constantemente que cambia todo el tiempo
Actualmente, en este periodo de transición, ese estado está mutando otra vez hacia un mundo “gaseoso y volátil”, en el que todo parece incierto, impredecible, sin sostén y en el que los valores son frágiles y se evaporan.
Un mundo donde es difícil distinguir lo verdadero, y donde casi todo es apariencia. Un mundo de verdades fabricadas y transitorias.
La enseñanza de Cafh es algo vivo. Los cursos de enseñanzas son medios para que la enseñanza fluya. Son marcos de referencia para nuestra comprensión y para nuestra inspiración.
La enseñanza no solo fluye durante la reunión. Podemos tener instantes de comprensión en otros momentos.
La reunión es una instancia de aprendizaje: aprendemos con nuestros compañeros y compañeras y a su vez aprendemos de ellos.
Nuestra misión social la realizamos abriéndonos y volcando hacia nuestro entorno la experiencia que realizamos, compartiendo los bienes interiores que recibimos y desarrollamos, en una vida activa y renovada.
Como ya se mencionó el orar es un don que nos pone frente a lo trascendente, frente a lo divino y eleva nuestra vibración interna, la cual se vuelca en energía espiritual y asistencia para otros.
Oremos para que fructifiquen las mejores posibilidades de la humanidad y de nuestro mundo.
¿Cuál es el aporte que hago con mi vida en este momento de la humanidad?
¿Qué aporte hice dentro de la familia en esta época de pandemia?
¿Qué aporte hice con mis vecinos, amigos y con la humanidad en general en la época de la pandemia?
SÍNTESIS
En el momento de ser parte de Cafh hemos aprendido a ser más conscientes ya que antes no nos deteníamos a reflexionar, a analizar, a pensar y a darnos cuenta de nuestro actuar del día a día y nuestro actuar no era lo más acertado.
Trabajamos diariamente para ser mejores personas, más coherentes llevando relaciones más armónicas, sensibles con nuestra vida y con todos los que nos rodean.
La sociedad ha cambiado de sólida permanente a líquida y actualmente a volátil nos hemos tenido que ir adaptando, aprender a usar los nuevos recursos electrónicos, de comunicación, aprender a comunicarnos y a escuchar a nuestro prójimo.
¿CUÁL ES EL SENTIDO DE MI VIDA AQUÍ Y AHORA?
¿CUÁL ES APORTE QUE HAGO CON MI VIDA EN ESTE MOMENTO DE LA HUMANIDAD?
Nuestro mundo está conmoviéndose hasta los cimientos.
Un cambio profundo se está produciendo de consecuencias desconocidas para los seres humanos.
Según nuestras enseñanzas, la Ley de la Renuncia será el modo de vivir de los seres humanos que vendrán.
Pero es evidente también que la humanidad en su conjunto está muy lejos aún de vivir en armonía con la Ley de la Renuncia.
Un mundo donde es difícil distinguir lo verdadero, y donde casi todo es apariencia. Un mundo de verdades fabricadas y efímeras.
Esta influencia también puede afectarnos a nosotros en Cafh. Podemos tener la sensación de que no estamos haciendo lo suficiente. Podemos cuestionarnos todo, particularmente si tiene sentido nuestro esfuerzo y compromiso.
Hijos de Cafh: mirad hacia el valle del mundo donde las almas claman por su salvación y reciben como respuesta rayos de luz oscurecidos, rugidos de los abismos profanados, voces proféticas de destrucción o voces de esperanza dadas por intermediarios!
Hijos de la Madre, ¿por qué no descendéis entre los hombres para enseñarles vuestra experiencia de Renuncia?
Llevad, Hijos de la Llama, vuestro Mensaje vivo a las almas, vuestro Mensaje de Renuncia.
Sólo desterrando del corazón de los hombres el Credo de Posesión podrán resucitar y vivir.
¡Expandid el Mensaje de la Renuncia a toda la Humanidad!
Que la Divina Madre las bendiga con su poder de Amor.
¿Cómo mantengo activo mi proceso de autoconocimiento y autotransformación?
Esto implica vivir de acuerdo con la Ley de la Renuncia.
Según nuestras enseñanzas, la Ley de la Renuncia será el modo de vivir de los seres humanos que vendrán.
Podemos apreciar que ya hay manifestaciones de un cambio de paradigma que apunta hacia un mayor nivel de integración y conciencia. Pero es evidente también que la humanidad en su conjunto está muy lejos aún de vivir en armonía con la Ley de la Renuncia.
Actualmente, en este periodo de transición, ese estado está mutando otra vez hacia un mundo gaseoso y volátil, en el que todo parece incierto, impredecible, sin sostén y en el que los valores son frágiles y se evaporan.
Esta influencia también puede afectarnos a nosotros en Cafh. Podemos tener la sensación de que no estamos haciendo lo suficiente. Podemos cuestionarnos todo, particularmente si tiene sentido nuestro esfuerzo y compromiso.
Cada uno de nosotros necesita desarrollar tanto sus características individuales como su capacidad de armonizar con los grupos con los que se relaciona.
Hace falta un cierto grado de autoconocimiento, nobleza y generosidad por parte de todos para que podamos desenvolvernos tanto los grupos como sus integrantes.
Cada uno de nosotros tiene su molde característico y sólo en ese molde puede desenvolverse. Nuestra labor espiritual consiste en conocer, pulir y transformar nuestro molde, no en cambiarlo por otro.
La vida espiritual embellece la vida cotidiana y trae paz y sosiego a los que nos rodean; nos enseña a dar valor a los bienes interiores, fortalece nuestras buenas tendencias y dirige hacia el Buen Camino las energías que generalmente malgastamos en objetivos intrascendentes.
¿Qué rol cumple Cafh en la humanidad actual?
¿Cuál es nuestra contribución a esta humanidad y a este mundo sufriente?
¿Cómo podemos constatar que estamos haciendo algo que marque una diferencia?
¿Qué va a pasar con la continuidad de Cafh?
¿Y si esta transición que vivimos es un paso necesario para desarrollar las capacidades y características que nos permitan vivir en un mundo donde la Renuncia sea la Ley?
¿No estaremos siendo empujados a buscar en nuestro interior ese punto de apoyo infinitesimal?
¿Cómo mantengo activo mi proceso de autoconocimiento y autotransformación?
SÍNTESIS
Si crear conciencia fuera como tomar agua, cualquiera lo haría, sin embargo no es así, crear conciencia es difícil si estás distraído e inmerso en tantos distractores de la vida diaria, que absorben nuestro tiempo, haciendo imposible guardar silencio para podernos escuchar internamente.
Después de tantos distractores de la vida; mismos que nos limitan a guardar silencio y estar en contacto con el interior y poder realizarnos.
Existen preguntas que nos es difícil responder como son:
1¿De dónde venimos?
2¿Qué sentido tiene nuestra vida?
3¿Hacia dónde vamos?
Y a estas mismas preguntas, ni nuestros padres tienen las respuestas, por lo tanto uno crece buscando las respuestas por el resto de nuestra existencia, cuestionándonos si esto es todo en la vida; nacer, crecer y morir.
Es en un momento de nuestras vidas cuando se siembra la semilla de la conciencia, unos a temprana edad, otros adultos y en algunos jamás germinó.
Es en un estado de aridez cuando empiezas a dudar de tu forma de ser, pues crecer usualmente duele y duele más cuando descubres que viniste a este mundo a cumplir una misión hasta ahora desconocida, y es cuando descubrimos lo importante que es cuidar de nuestra salud y es hasta entonces cuando te das tiempo para escuchar a tu voz interior, para preguntarte si estás estancado, y ver si realmente estás trabajando o estás viviendo sin sentido.
La Orientación Espiritual como medio para adentrarnos en lo desconocido de nuestro ser. Acompañamiento Espiritual. Para entender el efecto y la armonía del acompañante espiritual, hay que comprender la ascética de la renuncia, la práctica de la mística del corazón a través de la ascética de la renuncia nos lleva a 4 etapas
Bienestar
Dificultad o Conflicto
Comprensión
Integración, Expansión
Integración –Expansión al focalizar el bien común, surge en forma natural una actitud esencial para la sustentabilidad del grupo: el servicio el paradigma de líder, maestro, guía, jefe o dictador.
Cafh es la semilla de una nueva idea para una Nueva Era, una posibilidad futura. Siendo hijos e hijas de nuestro tiempo, no es extraño que no resulte fácil realizar nuestra labor… El futuro es cada vez más difícil de predecir. La complejidad de la trama social y la velocidad de los cambios, hace que cada especulación al respecto no sea más que un intento de atrapar el aire….
¿Qué podemos hacer? ¿Cuál es el sentido de los grupos de Cafh? ¿Por qué trabajamos en grupos?
Somos una reunión de almas que formamos el Cuerpo Místico de Cafh. Y al participar nos da acceso a los dones de Cafh.
Y a la co-participación de nuestro desenvolvimiento espiritual como grupo, pero al mismo tiempo individual.
Orientación espiritual entonces es: el acompañamiento por parte del delegado/a para que nos ayude en nuestro desenvolvimiento.
Y así conocernos, aclarando nuestros objetivos de vida y anhelos y descubriendo cómo podemos realizarlos, a través de la ascética de la renuncia y la mística del corazón.
¿Cómo es la práctica de orientador espiritual?
-No dirige nuestra vida.
-No da órdenes.
– No nos indica cómo deberíamos ser
– No nos califica con críticas.
– No nos hace sentir ver pero si nos da:
-Consejo si lo pedimos.
– Advertencias cuando ve que podríamos tomar decisiones que nos perjudiquen.
– Orientación en las prácticas espirituales.
– Aclarar las enseñanzas y formas posibles, de llevarlas a cabo.
La vida espiritual se asienta sobre la salud mental, y ésta sobre la física.
El Delegado/a atiende la armonía del cuerpo y del alma de los Hijos/as para que la vocación florezca en ellos en toda su plenitud.
El análisis y la guía amorosa del Delegado/a pueden hacer a todas las almas aptas para la vida espiritual.
Dentro del marco del paradigma paternalista:
El orientador espiritual puede entenderse como alguien que sabe lo que el otro necesita y le da respuesta a lo que el otro debe de hacer con su vida……
Reflexión sobre este tema:
Es bien sabido que todos tenemos nuestros puntos ciegos, y necesitamos complementar nuestra propia percepción con la de alguien que nos pueda escuchar con amor y desinterés y vea desde afuera nuestros conflictos
SÍNTESIS
El delegado/a como director Espiritual
En Cafh contamos con un delegado/a que nos orienta espiritualmente en cada una de las tablas, cuya función es escucharnos, orientarnos, sugerirnos, guiarnos y acompañarnos a través de entrevistas individuales las cuales son absolutamente confidenciales con la finalidad de apoyarnos en nuestro desenvolvimiento espiritual.
¿Cómo es la práctica de orientador espiritual?
* No dirige nuestra vida.
* No da órdenes.
* No nos indica cómo deberíamos ser
* No nos califica con críticas.
* No nos hace sentir ver pero si nos da:
* Consejo si lo pedimos.
Nos da advertencias cuando ve que podríamos tomar decisiones que nos perjudiquen.
* Orientación en las prácticas espirituales.
* Nos aclara las enseñanzas y formas posibles, de llevarlas a cabo.
¿He acudido a mi orientación espiritual? ¿Por qué?
¿Qué espero de la relación que tengo con mi orientador/a espiritual?
¿Cuál ha sido mi actitud cuando recibo la orientación espiritual?
¿He aprovechado la o.e. para adentrarme en lo desconocido de mi ser?
¿CÓMO EXPANDIMOS EL AMOR?
El amor interno primero
La Egoencia del ser es el valor por excelencia que habrá que desarrollar en la humanidad.
La Egoencia supone la armonía con la ley fundamental de la vida, la Renuncia. La felicidad ya no será algo que nos viene de afuera, a través de las coas, las teorías, las personas o las circunstancias sino algo que encontramos en nuestro interior, que nos proporcionamos a nosotros mismos.
El trabajo ascético-místico de los hijos e hijas genera una reserva de energías y un campo magnético se vuelva hacia la humanidad:
-La práctica de la economía providencial permite ayudar a los que padecen de necesidades
-La reserva de energías permite contribuir a la salud y bienestar de los enfermos
-El esfuerzo constante por unirse a lo divino permite a los hijos e hijas asistir y acompañar espiritualmente a las almas.
El amor y su expansión dentro de CAFH:
Para quienes ofrecen amorosamente su tiempo en la orientación espiritual implica un gran aprendizaje y una gran responsabilidad, la más delicada que se pueda tener en Cafh: disponerse para escuchar sin ideas preconcebidas, en silencio, respetar la intimidad del alma y la confidencialidad
Necesitamos resignificar la reunión de grupo para hacer de ella un espacio de aprendizaje, de experimentación y de profundo contacto espiritual. Es muy admirable que asistamos a nuestras reuniones siempre, por fidelidad, y aun cuando no sintamos el estímulo para hacerlo. Pero no deberíamos detenernos allí.
También la reunión se construye con la honestidad, el respeto y el cariño de los miembros del grupo. Es decir, la disposición de vivir el momento presente, la libertad para expresarse y la capacidad para percibir y responder a la necesidad del grupo. Finalmente, nuestra labor espiritual individual y en los grupos de Cafh no está completa sin el aspecto social de nuestra misión…
Como expandimos el amor, en nuestra sociedad y el mundo:
El trabajo interior es la esencia de nuestra misión mística, sabemos que no lo hacemos solo para nosotros. Nuestra vocación nos llama a la trascendencia, es decir, a ofrendar nuestro trabajo para el desenvolvimiento de todos los seres humanos.
Nuestra misión social la realizamos abriéndonos y volcando hacia nuestro entorno la experiencia que realizamos, compartiendo los bienes interiores que recibimos y desarrollamos. Nuestra obra social es lo que se derrama a nuestro alrededor por nuestra vida interior activa y renovada
Por otro lado, desarrollamos nuestra misión social en el contacto directo con las personas que encontramos en nuestro camino y en nuestro diario vivir. Dedicando tiempo y amor a escuchar, acompañar y compartir, brindándoles nuestra presencia.
También brindamos energía y amor a través de la oración. Orar es un gran don que nos pone frente a lo trascendente, al misterio de lo Divino Desconocido, eleva nuestra propia vibración interna y se vuelca en energía espiritual y asistencia para otros.
Recordemos lo que decía Don Santiago en el Mensaje de Plenilunio de 1957:
“La Renuncia es la Ley del mundo futuro y vosotros, Hijos de la Madre, estáis entre los precursores que viven esta Ley que será el modo de vivir de los hombres que vendrán.”
Los valores de la Ley de la Renuncia en la expansión del amor:
Frente a la falta de ideales y a la voluntad frágil y errática trabajamos desde el compromiso, la fidelidad, la perseverancia. Ante el individualismo y el egocentrismo, nos esforzamos en la escucha profunda y la ofrenda de nosotros mismos.
Procuramos transmutar el sectarismo, la polarización y la violencia a través del respeto, el diálogo, la inclusión y el amor desinteresado. Para paliar el egoísmo, el consumismo, el desgaste de nuestro planeta y la desigualdad, procuramos aportar conciencia con la práctica de la economía providencial.
SÍNTESIS
La expansión del amor está intrínsecamente relacionada a la misión y obra espiritual que hacemos en Cafh.
Para comenzar a expandir el amor es importante tomar en cuenta que todo empieza en el ser propio, amarnos a nosotros mismos, cuidarnos a nosotros y procurarnos es el primer paso de todo. Aunque no lo creamos, empezar por estar bien con nosotros mismos puede afectar de manera positiva a los demás.
Cuando comenzamos a expandir el amor y la comprensión hacia los demás debemos de tomar en cuenta que todo esfuerzo debe de realizarse desde el desinterés de obtener algo a cambio. Esta es la máxima expresión de dar por dar.
Recordemos que nuestras más mínimas acciones tienen impacto en los demás, como el efecto mariposa; donde cualquier acción por ínfima que creamos que sea puede impactar a una persona o a un grupo de personas a cientos o miles de kilómetros de donde nos encontramos nosotros. Es por esto que es de vital importancia ser amoroso con uno mismo y cuidar nuestras acciones por más pequeñas que parezcan.
Muchas de las acciones que hagamos en esta vida pasaran más allá y trascenderán a nuestra persona, tal vez lo veamos, tal vez no, pero muchas personas a lo largo de la historia invirtieron su tiempo, cariño y esfuerzo por poner una parte de ellos, su trabajo en el mundo, y muchas de estas personas jamás vieron los resultados de sus actos, estos con el tiempo impactaron la vida de muchas personas. Esto, a mi parecer, solo nos llama a ser lo más benevolentes posibles, amar por amar con desapego y sin esperar algo a cambio.
Reflexión en la misión de Cafh Profundicemos en la misión de Cafh
En la misión mística: ¿Cómo mantener vivo el entusiasmo por el trabajo espiritual de auto transformación a lo largo de toda nuestra vida?
Mantenemos el entusiasmo al practicar los ejercicios que nos enseña Cafh así como es el examen retrospectivo, la meditación, la detención, los retiros, las reuniones semanales, los trabajos anuales, al preparar cada uno de nosotros el tema que nos corresponde para desarrollar las enseñanzas que se ven en cada reunión, así como tener disciplina, constancia y dedicación. Todo esto lo aplicamos en nuestra vida.
En la misión social: ¿Cómo nos acercamos a las almas?
Nos acercamos de diferentes maneras, una de ellas es por nuestras acciones; cómo nuestros comportamientos del día a día en nuestras tareas cotidianas, tanto con nosotros como con las personas que tenemos alrededor. Ésta primera, es una manera indirecta, ya que a veces no tenemos contacto directo con la persona.
La segunda manera es acercarnos a las almas de forma directa, es decir, platicando y escuchando a las personas, conviviendo con ellas en actividades grupales o en diálogos más íntimos como pueden ser platicas de persona a persona, ya sea de forma presencial o vía remota.
Por último los cambios que hacemos en nosotros, lo ofrendamos por bien a la humanidad a través de nuestras acciones y pensamientos.
EL VALOR DE LA REUNIÓN DE CAFH
¿Cómo hacemos de la enseñanza un espacio de aprendizaje compartido?
“Cafh es una reunión de almas que buscan su liberación interior a través de un método individual exterior.” (Obra de Cafh)
La reunión de almas de Cafh se desenvuelve de acuerdo con su Reglamento, que consta de tres partes: Reglamento, Método y Ceremonial.
Con el objeto de desenvolvernos espiritualmente, adoptamos un método adecuado a nuestras características y situación en la vida, lo seguimos con fidelidad y atención, nos predisponemos a lograr ese desenvolvimiento.
La reunión de Cafh tiene un valor fundamental en la formación del desenvolvimiento espiritual. Cafh promueve la importancia de la reunión como un espacio donde los individuos pueden compartir experiencias, aprender y apoyarse mutuamente en su camino espiritual.
La reunión de Cafh suele incluir la práctica de la meditación, que es considerada como una herramienta esencial en la búsqueda del autoconocimiento y la transformación interior. La meditación en la reunión de Cafh puede ser guiada o individual, y se realiza con el fin de desarrollar la concentración, la introspección y la conexión con lo divino.
La reunión de Cafh incluye prácticas de disciplina interior, como la observación de los propios pensamientos, emociones y acciones, con el fin de desarrollar la autoconciencia y el autocontrol. Estas prácticas tienen como objetivo purificar la mente, el corazón, y facilitar el crecimiento espiritual.
¿Cómo hacemos de la enseñanza un espacio de aprendizaje compartido?
¿Las vivencias o experiencias que cada uno de nosotros tenemos pueden ser de utilidad a alguien de nuestro grupo?
¿Cómo puedo aplicar las enseñanzas de Cafh en mi vida para cultivar una mayor conexión espiritual y vivir de manera más consciente y plena?
El método de Cafh responde al hecho de que nuestra vida interior es inseparable de la exterior y de que nos desenvolvemos en relación.
El método organiza la reunión de almas de Cafh en grupos, y éstos en Tablas.
El propósito y la labor de los grupos de Cafh es lograr entre sus miembros la relación que deseamos para toda la humanidad. Y lograrla ahora. Este propósito en común hace de los grupos equipos de trabajo.
Los miembros de los grupos de Cafh nos reunimos; rehacemos nuestros vínculos sobre la base de una conciencia de participación
El propósito y la labor de la Tabla es nutrir y sostener el desenvolvimiento espiritual de sus miembros, proporcionando a cada grupo y a cada miembro de cada grupo el ámbito adecuado para lograr ese fin. Esa labor hace de la Tabla también un equipo de trabajo.
Todos los seres estamos unidos, aunque no siempre somos conscientes de esta unión. El trabajo en equipo despierta, mantiene y acrecienta esa conciencia.
Cada uno de nosotros tiene antecedentes, historia, etnia, creencias y características diferentes. Para que esas diferencias no nos separen hacemos un trabajo de equipo cuyo propósito es desenvolvernos, comprendernos y amarnos los unos a los otros.
El desenvolvimiento individual y el del grupo son interdependientes.
El trabajo individual interior se equilibra y armoniza con el trabajo en el grupo. Cada uno de nosotros trabaja sobre sí mismo y, al mismo tiempo trabaja como parte del grupo. El grupo trabaja sobre el grupo mismo como ente responsable de sus integrantes, y lo hace sobre el propósito común.
El grupo es el campo necesario para aplicar y evaluar la labor interior que efectuamos sobre nosotros mismos. Nuestra participación en el grupo nos permite verificar si la impresión subjetiva que tenemos de nuestra vida espiritual en los momentos de introspección se corresponde con nuestra manera de actuar
El trabajo en equipo se basa sobre una actitud abierta –libre de prevenciones y auto justificaciones defensivas– para recibir retroalimentación y en un compromiso firme que nos sostenga cuando haya dificultades.
Cada uno de nosotros es parte integral del grupo. El error y el triunfo de cualquiera del grupo son el error y el triunfo de todos sus integrantes.
Trabajar en equipo es en la práctica: aprender a vivir en armonía. Quizá ese sea el objetivo de nuestra existencia en este mundo.
¿Cómo hacemos de la enseñanza una vivencia conectada con nuestra vida diaria, una fuente de inspiración para ser seres humanos integrales?
¿Cómo puedo utilizar las prácticas y las técnicas de las reuniones de desenvolvimiento espiritual de Cafh para cultivar una mayor claridad mental, equilibrio emocional y bienestar en mi vida cotidiana?
SINTESIS
La reunión de Cafh tiene un valor significativo como un espacio de comunidad, meditación, estudio, cultivo de la virtud y disciplina interior, todo ello en el marco de la enseñanza espiritual de Cafh.
En el caso de la enseñanza es un espacio de aprendizaje compartido en las reuniones de Cafh, implica fomentar el diálogo abierto, practicar la escucha activa, promover la reflexión colectiva, propiciar la práctica vivencial, cultivar el respeto y la tolerancia entre los participantes.
Al hacer de la enseñanza una vivencia conectada con nuestra vida diaria y una fuente de inspiración para ser seres humanos integrales, implica aplicarla en la práctica, reflexionar personalmente, cultivar el auto observación, encontrar inspiración en ella y buscar una integración holística en nuestra vida.
EN EL REGLAMENTO DE CAFH
Este lo define como “Una reunión de almas que buscan su liberación interior”, la Reunión de almas indica la naturaleza espiritual de la relación entre los miembros de Cafh y que su base es el amor a la libertad interior.
La reunión es un espacio para recibir la enseñanza. Es una instancia de aprendizaje: aprendemos con nuestros compañeros y aprendemos de ellos. Podemos contrastar nuestra propia percepción, comprensiones, experiencias, ideas, con las de otros….. Creando el diálogo.
La reunión semanal es una pequeña comunidad de trabajo espiritual donde se hace evidente nuestro esfuerzo por vivir de acuerdo con la Ley de la Renuncia. Desarrollamos nuestra misión social en el contacto directo con las personas que encontramos en nuestro camino y en nuestro diario vivir. Dedicando tiempo y amor a escuchar, acompañar y compartir brindándoles nuestra presencia.
Al formar parte de Cafh nos unimos a un grupo compuesto por personas que no hemos elegido. Indica que el vínculo no se establece por afinidad o por parentesco, sino como consecuencia de la búsqueda espiritual. El sentido del trabajo en los grupos de Cafh es el de crear el ámbito donde compartimos ese espacio sagrado.
La sociedad humana ha ido cambiado aceleradamente en los últimos años: de un carácter sólido, determinista, predecible, de estructuras firmes, de valores y roles claramente establecidos. Pasamos a una sociedad llamada “Líquida”. Que cambia todo el tiempo. Actualmente, en este periodo de transición ese estado está mutando otra vez hacia un mundo gaseoso y volátil, en el que todo parece incierto, impredecible, sin sostén y en el que los valores son frágiles y se evaporan.
Cafh es un Camino del Fuego. Nuestra misión es trabajar para que no se apague la Llama y los seres humanos encontremos el punto armónico entre los valores humanos y divinos, el Ired.
Muchas veces queremos ver resultados inmediatos, queremos sentirnos bien con lo que hacemos. Eso es parte de nuestra cultura de la inmediatez. Pero es importante también tomar perspectiva suficiente para apreciar la misión de Cafh y la evolución de la humanidad desde una visión temporal mucho más abarcante que el tiempo de nuestra vida.
No estamos en Cafh solo para ser felices, para desenvolvernos nosotros o para darle sentido a nuestra vida. También tenemos algo para dar: estamos para dejar una huella, una semilla en el sustrato de la humanidad.
No hay fracasos en el proceso de la evolución, incluso en nuestras pequeñas vidas humanas. Hay intentos, hay aprendizaje, hay experiencias. Al correr del tiempo todo se integra en nuestra estructura vital, en nuestra chispa de conciencia.
Nuestra acción como individuos y como grupo no es irrelevante. Por la misma naturaleza de la idea que intentamos desarrollar, no vemos los resultados. Solo nuestra fe interior no guía. Esa es la expresión más clara de lo que significa vivir la Ley de la Renuncia.
Nos acercamos a quienes nos rodean sin pretender enseñar ni convencerlos de nada, sin la expectativa de lograr algo, simplemente para compartir. Nos conectamos cuando sentimos un genuino interés por el otro. Todos necesitamos sentir que confían en nosotros y en nuestras posibilidades.
Aprendemos a comunicarnos desde nuestro centro interior, desde lo auténtico, con el lenguaje cotidiano. Dejemos las teorías de la vida: En la experiencia del día a día todos podemos encontrarnos en terreno común.
Revivamos esa profunda confianza interior en el propio destino y en que el esfuerzo por desenvolvernos y por compartir nuestra experiencia hace una diferencia no solo para nosotros sino para la humanidad.
¿Cómo nos enriquecemos a partir de las diferencias?
¿Cómo dejamos emerger la sabiduría colectiva?
SÍNTESIS
El diálogo es un proceso de construcción conjunta e interacción constante. Es un espacio en el cual fluye una corriente de significados que emana del encuentro del conjunto de almas que comparten enfoques, visiones, narrativa y significados que aportan a una comprensión más amplia de la realidad.
Una de las misiones de Cafh es que los seres humanos encuentren un punto armónico entre los Valores Humanos como son el respeto, la tolerancia, la honestidad etc. Y los Valores Divinos como son el amar, el perdonar, el reconocer y más. Ya que en la actualidad estamos pasando por una sociedad denominada “Líquida” la cual está en cambio constante y está modificando a la humanidad para que los valores se vuelvan volátiles.
Estamos en Cafh para dejar una huella en la humanidad. Al momento de acercarnos a quienes nos rodean lo hacemos sin pretender convencerlos de nada, sin la expectativa de lograr algo, simplemente para compartir las enseñanzas que adquirimos. Todos necesitamos sentir que confían en nosotros y en nuestras posibilidades para poder conectar con demás almas, al obtener esto sentimos un genuino interés hacía el prójimo.
Cafh es una reunión de almas que buscan su liberación interior, la reunión de almas indica la naturaleza espiritual de la relación entre los miembros y su base es el amor a la libertad interior. La reunión es un espacio para recibir la enseñanza, una instancia de aprendizaje (aprendemos con nuestros compañeros y aprendemos de ellos) Se contrasta nuestra propia percepción, comprensión, experiencias e ideas con las de otros; creando el Diálogo.
¿Cómo creamos espacios de diálogos donde nos sintamos seguros para expresarnos tal como somos?
Los seres humanos, miembros de Cafh debemos encontrar un momento en el cual podamos transmitir las enseñanzas, debe ser un momento armónico y de empatía para hacerlo. Somos elegidos desde el momento que hemos recibido la enseñanza sin ninguna condición.
¿Cómo podemos a su vez transmitir e invitar a personas que nos rodean o que la casualidad o la causalidad hace que nos encontramos en nuestro camino?
Una manera que Cafh nos enseña es:
-La práctica de la “Economía Providencial”, permite que ayudemos a los que más lo necesitan.
-Nuestras reservas de energía, nos permite construir a la salud y al bienestar de los enfermos.
-El estar siempre unidos a lo divino nos permite poder asistir y acompañar espiritualmente a las almas.
Nos gustaría ver resultados inmediatos, pero no es así, tenemos que entregar tiempo y perseverancia para poder vislumbrar una pequeña chispa de luz para saber que estamos en el camino de transmitir e invitar a más personas para que conozcan las enseñanzas de Cafh.
No estamos en Cafh únicamente para ser felices y darle sentido a nuestra vida. Tenemos algo que dar, debemos dejar nuestra huella, una pequeña semilla, que podrá germinar en el terreno fértil de la humanidad.
No debemos rendirnos ni desanimarnos al primer intento de transmitir lo que cada uno de nosotros conoce del mensaje espiritual de Cafh, poco a poco iremos abriendo más puertas, mientras que nosotros nos iremos sintiendo un poco más seguros, un poco más nosotros mismos.
Mientras más seamos y nos comportemos como “nosotros mismos” y “nuestro interior”, mejor transmitiremos el mensaje. Todos pertenecemos a un experimento que consiste en encarnar los valores, escasos en el mundo actual.
-Frente a la falta de ideales y voluntad frágil, trabajemos desde el compromiso, fidelidad y perseverancia.
-Con el individualismo y egocentrismo, esforcémonos para la escucha profunda ofrendémonos a nosotros mismos.
-Transmutemos el sectarismo, polarización y violencia a través del respeto, diálogo, inclusión y amor desinteresado.
-Para afrontar el egoísmo, consumismo, abuso de nuestro planeta, desigualdad, aportemos conciencia con la práctica de la “economía Providencial”.
No vivamos esta práctica como algo volátil, nuestro esfuerzo y trabajo consistirá en hacerla parte de nuestra vida. Nuestra unión con Cafh es espiritual, la motivación es conocernos a nosotros mismos, y lo que tenemos es común es:
“El sentido profundo de nuestra vida”.
¿Cómo podemos estimular a nuestro alrededor la búsqueda de cambio, la novedad, sensaciones, curiosidad sobre las enseñanzas?
¿Cómo podemos transmitir los valores que genera a un grupo a una sola persona, a la cual deseamos dar a conocerlas enseñanzas de Cafh?
¿Cómo ser conscientes al estar en un camino de aprendizaje?
¿Cómo podemos desenvolvernos para transmitir las enseñanzas?
¿De nuestras vivencias de las enseñanzas de Cafh, que ideas podemos transmitir o aportar para dar a conocer el mensaje que nos brinda Cafh?
¿CÓMO GENERAMOS INTERDEPENDENCIA?
Nosotros como almas tenemos la interdependencia de estar unidos para apoyarnos en nuestro desenvolvimiento espiritual.
Todos los seres humanos, conscientes o inconscientemente, en forma positiva o negativa, participamos de la realización de la Idea Madre (Obra de Cafh 2012)
Este plan se desarrolla en etapas y la idea madre es precisamente esa finalidad particular que los seres humanos tenemos para realizarnos.
Algunos de los valores que promueven el adelanto personal son la voluntad, la responsabilidad, la inteligencia y el trabajo. Algunos valores que impulsan hacia la unión divina son la empatía, el amor y la conciencia.
¿Cómo generamos interdependencia?
¿Qué otros valores manejan para tener esa unión divina?
¿Por qué el desarrollo personal no es un fin sino un medio?
¿Qué es la mística del corazón para ti?
¿Cómo llevas acabo la obra de Cafh?
¿Consideras que nuestro desenvolvimiento espiritual nos lleva a una libertad?
SÍNTESIS.
La enseñanza de Cafh llama plan de evolución universal al esquema divino que rige la vida en cumplimiento de su finalidad.
Este plan se desarrolla en etapas y la idea madre es precisamente esa finalidad particular que los seres humanos tenemos para realizarnos.
El desarrollo no es un fin sino un medio porque no nos da respuesta acerca de cuáles son nuestros objetivos finales ya que siempre estamos aprendiendo y modificando nuestra manera de ser, corrigiendo de una manera nuestra forma de pensar y de ser una mejor persona ante los demás almas que nos rodean y sobretodo ser mejor para mí mismo.
La mística del corazón para mí es un sentimiento, un pensamiento centrado en el destino de una unión con lo divino, con la divina madre, el darse por darse sin buscar una recompensa.
La obra de Cafh, se manifiesta por los recursos que disponemos los humano, los cuerpos, las almas, las posibilidades, las capacidades, los bienes, la generosidad, la capacidad de empatía de sus miembros, etc. Está constituida por la obra interior, expansión de la conciencia, obra exterior, las acciones orientadas hacia el bien común.
Considera que la libertad es cuando aceptamos plenamente la realidad y nos hacemos cargo de ella. Cuando no buscamos seguridades. Cuando no nos afanamos por tener razón, cuando no nos atamos a idealizaciones, cuando no queremos tener todas las respuestas.
¿CÓMO CREAMOS AMBIENTES PARA QUE LAS ALMAS DE TODAS LAS EDADES PUEDAN REALIZAR SU BÚSQUEDA DE SENTIDO Y DISCIERNAN SU VOCACIÓN ESPIRITUAL?
Todos los miembros de Cafh participamos en la consecución de la obra, con el cuerpo físico, el intelecto, con nuestros afectos y con el espíritu.
Participamos con el cuerpo físico, con nuestro intelecto, con nuestros afectos, con el espíritu, con la práctica de la economía providencial, con la práctica saludable de vida, con el conocimiento de lo divino, que nos llega de manera diaria.
Lema como miembros de Cafh; “Hacer de la materia mente y de la mente materia”
Todos los seres humanos tenemos vocación. Queremos encontrar el sentido de nuestra vida.
La vocación espiritual es la fuerza íntima y profunda que nos da la visión de nuestro destino y la fuerza para no desviarnos de ese fin. Es la certeza íntima, primordial, que no se apoya en nada ni en nadie sino que, por el contrario, es el sustrato de lo que somos y de lo que anhelamos. LEYENDA
La vocación espiritual es la verdad que permanece a través de los cambios, de las doctrina, de las circunstancia, de los triunfos y de los fracasos, de las alegrías y de los dolores.
¿Cómo ayudarías a crear ambientes para que las almas realicen su búsqueda de sentido y vocación?
¿Has dudado en algún momento de tu vocación?
¿Te has identificado con el ermitaño?
SINTESIS.
Nuestra participación en la Obra de Cafh; Cuerpo físico; ponemos a trabajar cerebro, manos ojos y todo lo que poseemos física y magnéticamente.
Intelecto: estudiamos y ponemos la capacidad intelectual y creativa
Afectos; al obsérvalos y conocerlos tal cual son abocamos a expandirlos para comprender y sentir de manera más inclusiva y participativa.
Espíritu; sin especular sobre los atributos de Dios, le ofrendamos incondicionalmente todo nuestro amor y nuestro compromiso de responder a su llamado.
Cafh nos proporciona medios idóneos como la mística del corazón, ascética de la renuncia.
Economía providencial; utilizar lo necesario y cuidar nuestro entorno
Práctica saludables de vida; cuidar lo que comemos cuidar nuestra salud y bienestar nuestro y de los demás.
Conocimiento de lo divino, es la comunión o comunicación que tenemos con la divina madre.
Lema: como miembros de Cafh “Hacer de la materia mente y de la mente hacer materia”
La vocación espiritual se manifiesta en nosotros de diferentes maneras, no se la puede ni definir ni asir, pero su presencia es concreta y evidente en la vida de las personas. No es sentimentalismo, no es ideología, no es activismo. Esta arraizada en la esencia misma de la vida.
Cada uno vive su vocación de forma única.
Caminemos sólidamente por el buen camino sin dejarnos llevar por las emociones superficiales ni por los vaivenes de las circunstancias. Recordemos y alimentémonos siempre el entusiasmo aboquémonos a perseverar en nuestro anhelo.
Si somos sinceros sencillos y humildes; si caminamos despacio pero con firmeza la vocación nos guiará hasta nuestro fin, hacia Dios y hacia la divina madre.
CEREMONIAL COMO CONEXIÓN CON LO DIVINO Y TRASCENDENTAL.
Definición Conjunto de reglas y formalidades para la celebración de una determinada solemnidad
Somos entes espirituales en esencia. Existe nuestro espíritu en el plano anímico y físico al mismo tiempo.
Estamos sujetos a las leyes del libre albedrio y de los opuestos, uno nos indica lo que es el bien y el mal, el otro nos indica si nos esforzamos o nos estancamos.
Que podemos decidir entonces usando nuestra conciencia reconocemos que tenemos voluntad que nos permite clarificar y purificar nuestros pensamientos.
También tenemos el don de la gracia divina que es reconocer lo divino en nosotros. Según el Reglamento, el Ceremonial es uno de los dones de Cafh y constituye la Divisa visible e invisible de los miembros de Cafh.
Y la forma de hacerlo es a través de la práctica cotidiana del uso del método Cafh. Que nos permite por un lado tomar distancia, aprendiendo del recogimiento y encuentro cotidianamente, experimentando las enseñanzas.
Para actualizar nuestra posibilidad de liberarnos, de ser agentes de cambio positivo para nosotros y para la humanidad, necesitamos de un esfuerzo metódico para expandir nuestro amor y nuestro conocimiento. Prácticamente, necesitamos aprender a dominar el cuerpo, a pensar con lógica y método, a imaginar creativamente a ennoblecer los sentimientos.
Descubrir el valor de la detención y al ver dentro de uno, descubrir lo divino. Ahí descubrimos el buen camino de la vida espiritual y el secreto de la paz y felicidad.
También nos dan el pensamiento positivo, y trascender los opuestos, por un lado la posesión y por el otro el desprendimiento.
En concusión el ceremonial es: conjunto de reglas y formalidades para la celebración de determinada solemnidad.
¿CÓMO OFRECEMOS NUESTRA PRESENCIA, APERTURA E INSPIRACIÓN EN NUESTRO ENTORNO?
Ofrecemos nuestra presencia desde el momento que nos centramos en nuestro ser, practicando la Egoencia.
La Egoencia es pensar, sentir, es la propia esencia de nuestro ser dentro de nuestro propio corazón. Es olvidarnos de nosotros mismos, alejarnos del sentimiento del egoísmo.
Desde la Egoencia podemos amar sin limitaciones, estar unidos desde ese amor a todo cuanto nos rodea; a nuestros semejantes sin distinción de credo, color, región, no importa de dónde somos. Nos iremos dando cuenta que todos somos iguales y compartimos la misma esencia.
También amaremos al reino animal y vegetal, y sentiremos respeto por todo lo que nos rodea. “Egoencia”: es amor, dolor, vulnerabilidad, alegría-tristeza, fuerza inquebrantable.
Nuestra apertura debemos enfocarla, primero, comprendiendo los cambios que nuestra sociedad está sufriendo, desde hace ya un tiempo. Hay quienes opinan que se tenía un carácter sólido, determinado, firme, de valores establecidos. y en la actualidad cambia todo el tiempo, fluye, se mueve constantemente. Se ve más incierto, sin valores firmes, sin bases.
Para llegar y lograr esa apertura, los que estamos en el camino espiritual, debemos ser más practicantes de todo lo que Cafh nos ha dado y hemos ido aprendiendo a través de nuestras prácticas, como las reuniones semanales, meditaciones, retiros, examen retrospectivo, trabajo anual, etc.
El trabajo de nuestro interior nos dará la apertura para tener más consciencia y esperar el futuro con alegría, firmeza y sin temores.
La inspiración no debemos esperarla y buscarla afuera, sino en nuestro interior. Va a ser la luz que ilumine nuestro camino, pensemos en vivir en armonía con nuestro ser humano-divino. Los grandes cambios han sido hechos por individuos o grupos muy pequeños. Hagamos ese cambio cada uno de nosotros. Trabajemos hasta lograr vivir con la ley de la renuncia.
Como decía don Santiago:
“La renuncia es la ley del mundo futuro, y nosotros hijos de la madre, estamos entre los precursores que viviremos esta ley, que será el modo de vivir de los hombres que vendrán”
SINTESIS
Creo que nuestra presencia la podemos ofrecer, dejando el egoísmo, dejar de pensar solo en nosotros mismos, viendo todo a nuestro alrededor, brindándonos a quienes pueden necesitarnos, escucharlos, acompañando a un amigo si está enfermo o acaba de perder a un ser querido, comprender las necesidades de quienes nos rodean.
Nuestra apertura la podemos enfocar, en este tiempo, de tantos cambios, en la educación, el respeto, los valores, el criterio y pensamiento de los jóvenes tan diferente a los nuestros. Pienso que comprenderlos y entenderlos debería de ser nuestro enfoque, por nuestra edad, madurez que hemos obtenido a través de los años vividos, ya que ellos tienen mucho que enseñarnos.
La inspiración vamos a buscarla dentro de nosotros, como si estuviéramos a punto de escribir un libro o una poesía, hasta encontrar nuestra parte divina, y lo lograremos trabajando en nuestro interior, con todas las herramientas que ya mencionamos.
¿Cómo ofrecemos nuestra presencia en nuestro entorno?
¿Cómo podemos practicar la Egoencia para llegar a ella?
¿Cuáles son las herramientas que debemos practicar, si estamos en el camino espiritual?
¿En dónde debemos buscar para llegar a la inspiración?
¿Cómo lograremos vivir con la ley de la renuncia?
¿CÓMO CREAMOS AMBIENTES PARA QUE LAS ALMAS DE TODAS LAS EDADES PUEDAN REALIZAR SU BÚSQUEDA DE SENTIDO Y DISCIERNAN SU VOCACIÓN ESPIRITUAL?
Todos los miembros de Cafh participamos en la consecución de la obra, con el cuerpo físico, el intelecto, con nuestros afectos y con el espíritu.
Participamos con el cuerpo físico, con nuestro intelecto, con nuestros afectos, con el espíritu, con la práctica de la economía providencial, con la práctica saludable de vida, con el conocimiento de lo divino, que nos llega de manera diaria. (Obra de Cafh 2012).
Lema como miembros de Cafh; “Hacer de la materia mente y de la menta materia” (La obra de Cafh 2012).
Todos los seres humanos tenemos vocación. Queremos encontrar el sentido de nuestra vida. (Buen Camino 2010)
La vocación espiritual es la fuerza íntima y profunda que nos da la visión de nuestro destino y la fuerza para no desviarnos de ese fin.
La Vocación espiritual es la certeza íntima primordial, que no se apoya en nada ni en nadie sino que, por el contrario, es el sustrato de lo que somos y de lo que anhelamos.
La vocación espiritual es la verdad que permanece a través de los cambios, de las doctrina, de las circunstancia, de los triunfos y de los fracasos, de las alegrías y de los dolores.
¿Cómo ayudarías a crear ambientes para que las almas realicen su búsqueda de sentido y vocación?
¿Has dudado en algún momento de tu vocación?
¿Te has identificado con el ermitaño?
SINTESIS
Cafh nos proporciona medios idóneos como la mística del corazón y ascética de la renuncia; para mí es darnos por darnos, trabajar por trabajar, amar por amar, sin esperar nada a cambio, y dentro de la renuncia yo he renunciado a las cosas vanas, que no me alimenta, ni me deja seguir mi desenvolvimiento, a las cosas materiales entre otras cosas más. Cafh también nos habla de las prácticas saludables frugales, la economía providencial donde debemos cuidar y ahorra energías.
El lema que tenemos los miembros de Cafh es estudiar nuestras enseñanzas, entenderlas, aceptarlas y verlas con amor para nuestro bien, pero también hay que llevarlas a la práctica del día a día, hacerlas nuestras para que nuestro camino sea más práctico.
La vocación espiritual se manifiesta en nosotros de diferentes maneras, no se la puede no definir, ni asir, pero su presencia es concreta y evidente en la vida de las personas. No es sentimentalismo, no es ideología, no es activismo. Esta arraizada en la esencia misma de la vida.
Cada uno vive la vocación de forma única, cada quien va a su ritmo para desenvolverse espiritualmente. Si somos sinceros sencillos y humildes, si caminamos despacio pero con firmeza la vocación nos guiará hasta nuestro fin, hacia Divina Madre y hacia Dios.
CONCLUSION
Con estas enseñanzas que cada compañero desarrollo, hemos ampliado nuestra visión acerca de la misión mística y social de Cafh, conociendo cada vez más descubrimos que nuestra participación dentro de la obra utilizamos el cuerpo físico, el intelecto, los afectos y el espíritu.
Así también conocimos la función de cada delegado, que nos orienta espiritualmente, aprendimos sobre la economía providencial, sobre la mística del corazón, la ascética de renuncia, la Egoencia, la importancia de la reunión, aprendimos acerca del reglamento de Cafh, la importancia del Dialogo, como generamos la interdependencia, como ofrecemos nuestra presencia y apertura e inspiración en nuestro entorno, aprendimos acerca del ceremonial como conexión con lo divino y lo trascendental.
Como conclusión nos dieron herramientas que nos apoyan o nos sirven para tener un buen desarrollo pleno (la alimentación, el ejercicio, humildad, amistad, compresión aceptación, congruencia, etc.).
Con estas herramientas nosotros en forma personal e independiente haremos de nuestra vida un camino de desenvolvimiento, pero al mismo tiempo este crecimiento personal se convierte en participativo, tanto en la convivencia de nuestro ámbito social y familiar, como en la convivencia con nuestros hermanos de tabla.
En cada reunión daremos el fruto de nuestra labor de crecimiento personal hacia nuestros compañeros, hermanos de camino y así en cada reunión se convierte en un crisol, donde se amalgaman nuestras conciencias para el beneficio de todos nosotros como personas y como almas.