TRABAJO ANUAL 2021 |
CAFH |
TABLAS 124 y 205 |
30/11/2021 “LIBERTAD Y RESPONSABILIDAD” |
Libertad y responsabilidad son dos virtudes de la conducta humana que se dan en forma recíproca. No existe libertad goza de libertad. Podríamos decir entonces que ser libre es tener la capacidad de realizar el propósito que el ser anhela.
Desenvolvimiento interior, libertad interior, vivir acorde a sus decisiones de vida, acreditar la capacidad para metodizar la vida en los actos diarios.
LIBERTAD Y RESPONSABILIDAD
INTRODUCCION
El llamado de la vocación que nos llevó a formar parte del cuerpo místico de CAFH fue esencialmente el anhelo de Libertad interior. Este camino perpetuo de búsqueda, nos anima a desenvolver la Mística del corazón como aporte a la humanidad, para el advenimiento de una religión universal.
La búsqueda constante que nos impulsa a desenvolvernos, a dejar de ser el centro de atención para transformarnos en seres egoentes, participativos e incluyentes, conlleva incertidumbre ante lo desconocido. Por ello CAFH nos anima a osar renunciar al confort inicial que “nos aportaba todas las respuestas” y nos daba seguridad al tomar decisiones, realizar elecciones enmarcadas en las estructuras con las que nos encontramos al llegar a este mundo, para dar el salto al vacío reconociendo que somos producto de una cultura, un medio local, familiar, creencias etc. Así entonces, este despertar inicial es una bisagra en nuestra vida. Ya no podemos desentendernos de ella, por lo tanto, nuestras decisiones y elecciones deben ser coherentes con la vocación abrazada. He aquí, nuestra responsabilidad.
A través de la ascética de la Renuncia, nos hacemos consientes de nuestra finitud. Elegimos, entonces, darnos cada día como si fuera el último y transitar nuestro camino espiritual con la certeza de que estamos unidos a todas las almas, más allá de las diferencias.
Si bien hay experiencias que debemos vivir, que forman parte de la predestinación consecutiva, nuestro camino de desenvolvimiento interior se basa en la Ley arbitral de posibilidades que nos anima a confiar en nosotros mismos, a hacernos responsables de las elecciones y decisiones que tomamos. De no ser así, viviríamos, como expresa Erich Fromm (al referirse a los postulados religiosos que han regido, principalmente en nuestra cultura occidental), “con el sentimiento de impotencia e insignificancia individual y con la IRRESPONSABILIDAD de que lo que está predestinado, será”
Así el dolor, la alegría, los logros, los desaciertos… experiencias que mayormente forman parte de las elecciones que realizamos, son transitadas con el derrotero puesto en desenvolvernos a fin de brindar a la humanidad toda, esa cuota de conciencia que también la impulse a desenvolverse y abra la puerta a un amor más expansivo e incluyente.
LIBERAD INDIVIDUAL
Las almas anhelan libertad. Para lograrla suelen caer en derroteros que no culminan en la liberación. Estos recorridos podrían clasificarse de la siguiente manera:
- Materialismo: bajo la tiranía del objetivismo, siendo un engranaje más de una máquina que trabaja sin fin.
- Idealismo: bajo la tiranía de la mente, enredados en una madeja racional que suele distorsionar percepciones.
- Devoción: bajo la tiranía de los dogmas que impiden la expansión hacia otras posibilidades.
LA LIBERTAD REAL NO ES VIVIR HACIA AFUERA NI HACIA ADENTRO. ES SER LO QUE SE ES: UN SER HUMANO CON UNA INFINIDAD DE POSIBILIDADES.
La vía que propone CAFH a través de su método apunta hacia la libertad interior. Conocernos a nosotros mismos, a la realidad circundante y a la relación entre nosotros y las leyes que nos rigen es la base para actuar provechosamente dentro de esas leyes, en pos de la conquista de nuestra libertad.
Para el pleno desenvolvimiento es esencial ser veraz consigo mismo. Resulta necesario desprendernos de cualquier imagen idealizada y perfecta de nosotros. Al desarrollar veracidad nos hacemos más responsables y viceversa. Este círculo de retroalimentación beneficiosa convierte a la responsabilidad en una forma de ser.
LIBERTAD Y RESPONSABILIDAD EN LAS RELACIONES
“El derecho de los miembros de Cafh de formar parte de su Cuerpo Místico lleva aparejada la responsabilidad de hacerse acreedor a ese derecho. Además, la misión de los Hijos y de las Hijas de llevar a cabo la Obra de Cafh en el mundo, requiere de ellos la capacidad de integrar grupos armónicos cuyos miembros tengan como objetivo la misión a realizar y no el de prevalecer sobre los demás”. Método, Capítulo Primero.
A medida que desarrollamos nuestra libertad interior, desarrollamos también la actitud de ser honestos con nosotros mismos, esto nos hace cada vez menos dependientes de las circunstancias y del deseo de prevalecer. Tomamos conciencia de que nuestras decisiones no solo nos afectan a nosotros sino también al entorno, a la sociedad en que vivimos y a la realidad toda.
Elegir con plena conciencia nos lleva a ejercer nuestro libre albedrío para trascender la tendencia a ocupar un lugar de privilegio y a participar con todos.
Nuestra libertad y responsabilidad nos lleva a aceptar la diversidad como una fortaleza que transforma todas las relaciones interpersonales.
Nuestro sentido de responsabilidad nos lleva a contextualizar nuestro libre albedrío. Al comprometernos con el desenvolvimiento espiritual, asumimos la responsabilidad de que nuestras elecciones sean cada vez más inclusivas ampliando el contexto de participación, valorando la riqueza de la diversidad para construir un mundo mejor. Es la vida misma el escenario donde manifestamos el amor a través de una actitud egoente en las relaciones interpersonales.
La libertad y la responsabilidad en la sociedad.
La libertad y la responsabilidad en la sociedad, como hijos de la gran corriente de cafh, nos convoca a incorporar y desarrollar habilidades que sean coincidentes con los postulados que se pretenden promover en el camino; el primer paso para transitar es la aceptación, ya que se requiere aceptar a las demás personas, sus pensamientos y anhelos. Aceptar es en principio de igualdad, ya que sin aceptación real no hay posibilidad de inclusión. Cuando se analizan las relaciones interpersonales vemos como el intento por prevalecer no ha desaparecido; no es una actitud física como en la antigüedad, más bien son las ideas las que intentan imponerse. Los puntos de vistas no dejan ver al otro como un ser individual en la totalidad, cada alma con sus propias inquietudes, necesidades de desenvolvimiento. Otro paso para ejercer la libertad con responsabilidad en las relaciones es comenzar a practicar aplazamientos de juicios valorativos, ese acto no ayuda a despojarnos de nuestras viejas estructuras mentales y comenzar a reemplazarlas por nuevas que observen la realidad sin estar sesgadas o teñidas de un viejo ser que actúa instintivamente, para dar paso a lo racional, y poder desplegar el ser que siente al otro como un alma que está unido al todo.
La libertad en la sociedad no solo se ejerce en función del desenvolvimiento individual, debe ser un faro que referencie a otros a seguir el camino del encuentro y la unión sustancial, por ende, la responsabilidad debe ser en este único sentido.
Cuando en el alma comience a desaparecer, el ego de prevalecer sobre otros, de imponer ideas, dejará de estar cegada por puntos de vistas estructurados adquiridos por mandatos sociales y culturales. Entonces podremos comenzar a incorporar nuevas formas de pensar y sentir, ver mejor y más profundo, esto llevará a una inclusión natural y sincera, sin necesidad de forzar las relaciones en las que nos toca desenvolvernos, y cohabitar con el resto de nuestra sociedad.
LAS LEYES
Nuestra libertad y responsabilidad se encauza y desenvuelve en el marco de cuatro leyes fundamentales:
- La Ley de la Renuncia.
- La Ley de predeterminación consecutiva.
- La Ley Arbitral de Posibilidades. – La Llamarada.
El cambio continuo del devenir nos muestra que vivir es renunciar. Entender la Renuncia como una ley nos permite comprender y aceptar que debemos desprendernos de todo lo que atesoramos. Vivimos la Renuncia como práctica ascética-mística a través de tres actitudes: Presencia, Participación y Reversibilidad.
La Ley de Predeterminación Consecutiva determina la situación en qué nos encontramos en cada momento de nuestra vida. Nuestro presente es el resultado de la sinergia producida por nuestras acciones pasadas. La sinergia en nuestras acciones está íntimamente ligada a la sinergia de las acciones de toda la humanidad. Esta ley se divide en tres: Personal, Causal y Colectiva
La Ley arbitral de posibilidades establece el marco en el que ejercemos nuestro libre albedrío. Representa la forma en que respondemos a la ley de predeterminación consecutiva. Las dos leyes operan en forma simultánea y armónica.
La llamarada es el momento en que descubrimos nuestra vocación espiritual. Es una ley porque es un hecho que se presenta en la vida de todos los seres humanos.
LIBERTAD Y RESPONSABILIDAD EN RELACIÓN A CAFH OBJETIVOS:
- Reflexionar sobre la libertad y la responsabilidad en relación al Cuerpo Místico de Cafh y el trabajo en el grupo con los hijos/as.
1_ Art. 2º: Cafh es una reunión de almas que buscan su liberación interior a través de un método individual exterior.
2_ LA LIBERTAD: es la búsqueda que moviliza con mayor fuerza a la especie y, que es a la vez, la más dispar en sus expectativas de logro.
El ser humano es intrínsecamente libre de pensar, sentir y actuar como elija hacerlo; pero, nunca antes tantos seres humanos han tenido la posibilidad de elegir entre tantas opciones, en todos los campos, como las que tenemos hoy. Sin embargo, comprobamos que no es el poder elegir entre gran cantidad de opciones lo que nos lleva a la plenitud, sino la capacidad de elegir aquellas opciones que nos conducen a realizar nuestro fin último.
(Mensaje de Plenilunio 2011). (Alocuciones 1997- 1998)/
La enemiga de la libertad es el temor al que se derrota a través del manejo de la Rueda Control.
(Las Ruedas Etéreas – El vencimiento del temor)
3_ LA LIBERACIÓN ESPIRITUAL, implica el desarrollo de la individualidad. Un aspecto de este desarrollo es hacerse RESPONSABLE de la propia vida en cuanto a las decisiones pasadas, la condición actual y, asumir esta responsabilidad significa también resolver los conflictos que puedan surgir a raíz de esas decisiones. (Alocuciones 1997 – 1998)
La llama de la Divina Madre brilla sobre el monte de las aspiraciones pero, ¿Cómo llegar hasta allí?
Entonces el neófito titubeante se pregunta: ¿si soy un ente libre, por qué no puedo libertarme de las pasiones qué me atan a la tierra? Y, soy un esclavo a una ley inexplicable tramada por el destino, ¿por qué luchar contra los imposible? (La Llamarada – Santiago Bovisio)
¿Cada una de las elecciones personales que me determinan es producto de mi libre elección o del inapelable destino?
Ley de Predestinación Consecutiva
- Ley Personal
- Ley Causal
- Ley Colectiva
Ley Arbitral de Posibilidades
(La Llamarada – Santiago Bovisio)
4_ Las palabras básicas para el Desenvolvimiento Espiritual son las siguientes:
- Callar 6. Querer
- Escuchar 7. Osar
- Recordar. 8. Juzgar
- Comprender 9. Olvidar
- Saber 10. Transmutar
Calle el discípulo, y espere. Callar es la primera palabra que ha de conocer el estudiante y le dará la solución de las otras nueve, que se enumeran a continuación. (http://www.santiagobovisio.info)
El voto de Silencio acerca al alma a Cafh. Encierra en Cafh al novel aspirante. El de Fidelidad, es una introducción de Cafh al alma. Consagra al aspirante a la obra. Este voto induce al alma a observarse y a superarse, ya que esta virtud implica control sobre los actos y los pensamientos.
5_ El proceso de la liberación de la voluntad personal empieza con la Obediencia y sigue con la Renunciación.
El alma advierte al cabo de un tiempo, que el cumplimiento de sus obligaciones, su consagración y aun su amor a la Divina Madre son, en último término, una satisfacción personal, un noble placer, pues siempre es la voluntad personal la que dirige sus pasos y gradúa su realización. Es entonces cuando decide dar un sentido impersonal a su trabajo espiritual, sometiéndose con el voto de Obediencia, a la voluntad más libre del Superior.
(Santiago Bovisio) Curso VIII – Enseñanza 14: De los Votos)
Libertad y responsabilidad en cuanto a la Misión – Visión de Cafh
La misión de Cafh es llevar a la humanidad el mensaje de desenvolvimiento de la conciencia y la autorrealización, a través de la ascética de la renuncia. Es ofrecer a la humanidad un camino de desenvolvimiento apto para todos, que permita la realización de nuestras infinitas posibilidades como seres humanos, según nuestra voluntad y nuestras características. Como el camino espiritual que Cafh remarca la responsabilidad y la capacidad individual de aprender, no adhiere a dogmatismos irreductibles ni se somete a personalidades carismáticas o de otra índole. Cafh no tiene las respuestas definitivas ni tampoco la solución a los problemas del mundo, pero provee medios para desenvolver una humanidad en la que se armonicen los principios fundamentales de las diferentes creencias actuales en pos del advenimiento de una religión universal
La visión, es la unión sustancial del alma con la Divina Madre y con toda la humanidad. Dicho bien supremo, presupone andar un camino de gran compromiso con nosotros mismos, un actuar recto, una conducta regida por el autodominio y un trabajo sobre nuestra alma que la aparte de lo que no condice con su naturaleza y su destino. En otras palabras que podamos ejercer nuestra libertad con conciencia, autodominio y responsabilidad.