RESISTENCIA A APRENDER ALGO NUEVO

 

TRABAJO ANUAL  2020

Damas y Caballeros Patrocinados

Tabla Nro 100 de Santiago de Chile

 

Introducción

 

Este Trabajo Anual no pretende ser una receta para dar la solución a aquellas almas que también tienen o perciben una resistencia en aprender algo nuevo ya sea en una cierta área del conocimiento o en algunas de las actividades que realizamos o no realizamos a diario en nuestro hogar, por ejemplo: cocinar, limpiar la casa, lavar la loza, planchar, o en temas tecnológicos (usar un computador, acceso a Internet, usar un celular y aplicaciones), etc.

Solo pretendemos dar nuestros puntos de vista y de acuerdo a nuestras experiencias de vida por qué en algunas áreas nos resistimos a querer aprender o hacer algo nuevo. Esperamos que este trabajo les sea un aporte para que puedan mirar nuestras opiniones y les ayude a ampliar las suyas. 

 

Definiciones

• Aprehender según RAE significa: Coger, asir, prender a alguien, o bien algo.
• Aprender: según RAE, es adquirir el conocimiento de algo por medio del estudio o de la experiencia. 
• Para la psicología y educación: por definición, aprehender significa asimilar o comprender una idea o un conocimiento por completo. Muchas veces, en el proceso de enseñanza-aprendizaje, confundimos aprender con aprehender. El auténtico aprendizaje es el aprendizaje significativo, el aprendizaje con sentido.
• Resistencia: (según la RAE)

1.- Acción y efecto de resistir o resistirse.

2.- Capacidad para resistir

3.- Conjunto de las personas que, generalmente de forma clandestina, se oponen con distintos métodos a los invasores de un territorio o a una dictadura

4.-  En el psicoanálisis, oposición del paciente a reconocer sus impulsos o motivaciones inconscientes.

5.- Dificultad que opone un circuito al paso de una corriente

6.- Elemento que se intercala en un circuito para modificar el paso de la corriente o para producir calor. 

7.- Fuerza que se opone a la acción de otra fuerza

8.- Magnitud que mide la resistencia y cuya unidad en el sistema internacional es el ohmio.

9.-  Fuerza que en una máquina dificulta su movimiento y disminuye su efecto útil, por ej. el rozamiento, los choques, etc.

• Resistencia Pasiva: Renuencia a hacer o cumplir algo.

 

Resistencia a aprehender algo nuevo.

(Dama Lectora: Rita)

 

El miedo a aprender cosas nuevas. 

 

Personalmente en mi caso, el solo hecho de lograr aprender cosas nuevas y/o extrañas para aquel momento en particular en que me produce miedo y desconfianza, es cuando otra persona que no me agrada me dice que lo haga “por mi bien”. Puedo negarme a aprender pero la única persona que se perjudica soy yo misma. Porque me niego a ver de otra manera mi entorno y mis relaciones personales. Y debo tener en cuenta que no estoy sola en este mundo.

 

En mi vida he tenido que aprender muchas cosas en distintas etapas de mi existencia. Para lograr aprender algo se debe tener entusiasmo, le debe gustar y tener mucha voluntad para hacerlo o tener fuertes propósitos para obtener éxito en la tarea. Pero cada uno se desenvuelve de manera distinta, no existe otra igual que yo, podremos ser similares pero no iguales.

El deseo de estar activa en materias que me gustan me alimenta el espíritu, me conecta con lo divino, me da la libertad de elegir, soy más responsable, soy más capaz de realizar la tarea que me propongo y cumplo con mi objetivo porque viene de mi interior lograrlo.

 

Nuestra mente se pone floja, en inercia sino estamos continuamente activándola. Aprehender por aprender no tiene ningún sentido si solo se quiere tener conocimientos. Todo conocimiento que no se comunica y solo se acumula envejece. Lo que uno aprende se debe poner en práctica, se debe actuar para lograr  un aprendizaje de ellos.

 

Pero creo que todos al emprender algo nuevo nos llevan a reflexionar y  a cuestionar  las habilidades, virtudes y defectos. Además de nuestra autoestima y la voluntad, éstas  juegan un rol importante en cada uno de nosotros. En las dificultades está el trabajo de desenvolvimiento, para poder continuar y observar  mis debilidades, reconocer y poder planificar mi camino para poder lograrlo. 

 

El proceso de aprendizaje es largo y depende de nosotros mismos que pueda dar frutos al cambiar lo que nos molesta, nadie nos puede enseñar a desenvolvernos, nos pueden guiar pero no enseñar, ya que es un camino individual que debe recorrer cada uno.

“Libertad y responsabilidad son la clave de nuestro aprendizaje. Este binomio libertad-responsabilidad es la más genuina expresión de la Ley de la Renuncia.” (Mensaje Plenilunio 2020)

 

Mi historia con Cafh

 

No fue fácil para mí entrar en el camino, ya que mi familia por tradición son Católicos comprometidos con la Iglesia. En cambio yo seguía por inercia la religión católica. Pasaron varios años buscando lo que necesitaba mi alma. Hasta que por algo misterioso  de la vida conocí a una hija de Cafh la que me invitó a conocer el camino de Cafh.

En un comienzo en la asistencia a la primera charla o en la entrevista  con las personas  de Cafh fue para mí una novedad,  pero al pasar el tiempo de espera comencé a  dudar  si  este era mi camino de desenvolvimiento, el que me convenía para desarrollar mi parte  espiritual. 

En un  principio comencé a poner en una balanza mis prioridades, mis afectos, mis creencias de familia para lograr entrar a Cafh y ser una más en el camino de renuncia.

 

Cuando entré al camino de Cafh y comencé mi camino, empecé a tener cambios de actitud y de responsabilidad con mi entorno. Yo hacía la diferencia por tener mayor conciencia de mi forma de realizar las cosas, de la forma de relacionarme con las demás almas, de la forma como iba cambiando mi perspectiva del mundo y del universo.

 

Los trabajos ascéticos, las meditaciones, el conversar en reuniones y en la conferencia particular dando a conocer mis pensamientos y sentimientos sobre algunos temas que me aquejaban en mi interior. El aprender a decir las cosas, sin miedo al ridículo o a la mofa de otras personas cercanas a mi entorno. El trabajo interior de desenvolvimiento de la Hija o Hijo debe ser constante y continuo para poder crear un hábito, además en este trabajo debe estar involucrada la voluntad y la responsabilidad de querer hacerlo y con absoluta conciencia de ello. No podemos quedarnos quietos y conformes con lo logrado. Este trabajo consciente de cada alma que quiere desenvolverse es para toda la vida.

 

Para la misión del 2020, DGM nos dice, Hijos e Hijas los invito este año a dedicarnos a la siguiente misión:

 

“Hagamos un aporte concreto desarrollando plenamente la habilidad de la escucha activa. Hagamos la práctica diaria de escuchar con el corazón cada vez que se nos brinde una oportunidad. Escuchemos con el corazón especialmente a quienes piensan y sienten diferente que nosotros.” 

 

Pongo esta misión en el trabajo porque es muy importante escuchar y escucharnos ya que sabiendo lo que se hoy hubiera podido aprehender y aprender más de mi misma, y lograr revertir algunas de mis dificultades más frecuentes. Por ejemplo: aprender a dejar hablar a nuestro interlocutor y no tener ocupada mi mente con pensamientos de crítica, aprender a dejar a la otra parte expresarse libremente y no juzgarle. Cuando somos considerados y amables, y logramos entender mejor a nuestro interlocutor, estamos realizando una escucha activa y dejando ser el centro de la atención.

 

Otra de las frases en el mensaje de Plenilunio 2020 que me provoco alegría y esperanza fue; 

“Nuestro ideal es un faro que nos muestra el horizonte hacia el que caminamos.” 

 

Con esta frase la DGM nos impulsa a trabajar con nuestras fortalezas y debilidades para mejorarlas y/o cambiarlas por algo positivo que nos llevará a desenvolvernos en este mundo junto a la humanidad que existe en el interior de cada hijo/a.

 

Instancias de vida

 

El aprender cosas nuevas puede provocar en uno un desafío para poder lograrlo, como por ejemplo aprender inglés y francés para poder nivelar los conocimientos del curso 1° de E.M. del Liceo N°1 de Santiago, mis compañeras venían de colegios que tenían esos idiomas incorporados en el currículum. Estuve matriculada y asistiendo a clases por todo un semestre. Esto me provocó angustia e incertidumbre ya que era un liceo y una metodología nueva para mí, el asistir con compañeras extrañas y adultas. Yo estuve 8 años en una Escuela Básica con compañeras y profesoras durante todo ese tiempo, por ese motivo me sentía como un pollito en corral ajeno. Pero tenía que aprehender a aprender sí o sí. Cada día, estudiando y practicando el idioma buscando videos, casete, etc., pero para mí era algo extraño, no entendía la fonética ni la estructura gramatical para hablarlo. Luego de terminar la Enseñanza media y la Educación Superior viajé dos veces a Australia en períodos de tiempo diferentes, pero aun así no logré obtener fluidez. El idioma no es mi habilidad. 

 

En cuanto al área culinaria la aprendí en la Escuela Básica. En el programa de estudio estaba la asignatura de Economía Doméstica, en ella aprendí a cocinar, a preparar los alimentos, a usar de los utensilios y el orden en la cocina. Aprendí pero solo he practicado la parte de la pastelería cuando puedo o en ocasiones importantes. Mi madre en la casa se encargó y se encarga por años de preparar la comida de todos nosotros, mi padre y hermanos, ella siempre nos decía que no nos ocupáramos de la alimentación solo de estudiar. Bueno al crecer me quedé viviendo con ella y cada vez que quería hacer algo salado o dulce ella dudaba si sabía hacerlo, me miraba y me daba indicaciones como ella lo hacía no me dejaba aprender cosas en la cocina. Por lo tanto para mí no era muy agradable me sentía dando examen y para no herirla dejaba que ella cocinara. Cuando quiero comer cosas diferentes las compro pero no muy seguido. Creo que con el tiempo deberé hacerlo, por eso tengo muchos libros de cocina de preparación fáciles y link de YouTube.

 

Otras de las cosas que me provocó miedo fue el hecho de aprender a manejar el auto de mi padre que permanecía en el garaje. Al tener que ir todos los días al trabajo que me quedaba lejos, mi padre me propuso que lo usara y me hiciera cargo del auto.

Al principio mi padre me enseñó en el mismo auto, pero me ponía nerviosa. Un día en esas prácticas no pude dar bien la vuelta y choqué el auto con un poste, aunque iba lento y el auto no sufrió abolladuras solo raspones en el parachoques delantero pero él se alteró, me gritó mucho y desistió de seguir enseñándome. Pero luego me matriculé en una escuela de manejo. Los compañeros eran personas con las mismas aprensiones.

 

En cuanto a lo que me gusta, esto es trabajar con la naturaleza, las plantas y los animales. Es un hábito que adquirí con los alumnos de la Escuela de sordos. Con ellos era muy fácil poner en práctica mis conocimientos. Además que compartía con otros profesores el mismo interés de mejorar el medio ambiente. Realizamos diferentes campañas de limpieza y hermoseamiento de los jardines de la escuela.

 

Para esto el colegio participó en el área del Medio Ambiente de la Comuna, por lo que a varios profesores nos capacitaron y nos entregaron materiales para poder realizar esta actividad. Planificaba cada clase teniendo en cuenta las características de los alumnos y el espacio del lugar. Poco a poco fui adquiriendo confianza en mí y en mi trabajo, lo que posteriormente no me pareció difícil y aprobé el curso.                                                                                                                                                                                    

 

Conclusiones

 

• Para mí, Hija de Cafh, el aprehender a aprender es una herramienta que ayuda y facilita reconocer nuestras dificultades. Para obtener un desenvolvimiento particular de cada uno tenemos que estar conscientes del trabajo que realizamos, y con la seguridad de que todos los Hijos e Hijas de Cafh estamos en el mismo proceso de desarrollo espiritual. 

 

• El abrirnos a lo desconocido significa que debemos aprender de todo cuanto nos rodea dejando lo seguro y lo predecible, no siempre tenemos  la verdad o la razón, solo somos seres humanos y parte de toda la humanidad.

 

• Cada enseñanza está escrita para que pueda ver la diversidad que existe en los diferentes procesos en cada ser humano, en nosotros. Somos seres particulares y únicos con necesidades diferentes y especiales. Somos parte del universo de posibilidades que nos entrega y nos muestra la Divina Madre para aprender y caminar en el desenvolvimiento.

 

• El aprender nos libera a ser autosuficientes y poder tomar decisiones sin la presión de la ignorancia y la incertidumbre.

 

 Visión del alma con la Divina Madre

(Dama Secretaria: Lucia)

 

Somos almas de Cafh y siempre debemos tener muy presente nuestra libertad interior como hemos elegido esta senda, este trayecto, este camino. Tener muy presente que hay una relación profunda entre la vida espiritual que cada día vamos trabajando, tal vez con idealizaciones que van cambiando a medida del trabajo interior que cada alma va haciendo, dándonos cuenta que debemos tener una vida real, cotidiana, dejando de lado y aceptando todo aquello que no nos permite avanzar, para ello hay que aprender a perdonar con el corazón cada instante, aceptar a las almas que nos rodean con sus características propias porque hay que comprender que cada una de ellas tienen aspectos a trabajar de acuerdo a su infancia; son las falencias y otras características positivas, ambas forman nuestra vida real la cual lentamente se va adosando a nuestro quehacer espiritual, cuando el alma comprende y acepta desde su perspectiva con el corazón lo positivo y lo negativo que posee; ahí empieza a trabajar en aquello que hay que cambiar en nuestra espiritualidad, siempre el alma que tiene que trabajar constantemente en ello y no flaquear, por ende es muy importante la cercanía con el guía espiritual que va apoyar a esa alma para que continúe en ese camino de desenvolvimiento con la Mística del Corazón además de dar orientaciones que el alma requiere en lo espiritual; eso es un gran apoyo que el guía ayuda a ese desenvolvimiento del alma.

El alma así debe aprender hacer una buena escala de sus características propias y poner la más importante arriba del último escalón reconociendo que es la Unión con la DM; luego hacia abajo escribir todas las falencias que tenemos como alma para empezar a trabajar en ellas y con apoyo de lecturas, observación, enseñanzas y consultas al Director Espiritual ir lentamente cambiándolas con esa fuerza interior de la mística del corazón; esto el alma debe hacerlo siempre, en todo momento.

Hay instantes que el alma hace un paréntesis porque hay algo que le impide trabajar a “full time” pero no olvida lo que es para ella lo espiritual, tal vez en ese momento el alma está pensando en otra cosa sin dejar las ideas de Cafh; esto lo viví cuando como alma falleció mi esposo. Pero también en ese momento pude sentir de corazón esa gran mística que los compañeros de grupo, los guías espirituales que he tenido durante todos estos años y los caballeros de comunidad de Paine se hicieron presente de muchas maneras: por Internet, por las oraciones hacia mí como alma de Cafh y otros asistieron para acompañarme: esto ha sido; tal vez uno de los momentos más hermosos de mi vida porque no me imaginé que Adolfo partiera de repente luego de estar casados más de 25 años: fue una experiencia muy linda para mí y estoy muy agradecida porque veo y siento que no solo está escrito sino la disposición a estar acompañándome con los principios de Cafh, hacerlo una realidad fue muy hermoso.

Pienso que el alma debe tener conocimiento de los aspectos positivos y de los negativos para ir cambiando los últimos. También es necesario observar cómo me resisto a aprender algo nuevo

En la culinaria no tengo dificultades puedo realizarlo sin mayores problemas; para hacer una preparación alimenticia nueva. En los aspectos artísticos creo conocer mis falencias al hacer un dibujo o escribir una oración tengo muchos problemas debido a mi dificultad visual de un astigmatismo muy severo desde niña ya que el oftalmólogo cuando me evalúo a los seis años dijo que como yo era regalona, decía que no veía bien… Pasaron muchos años y recuerdo que en básica y en enseñanza media cuando leía un libro las letras se movían juntándose la líneas junto a la línea anterior, esto era muy complicado para mí por ende no soy buena lectora. Así cuando ingresé a la Universidad un día empezó a caer de mis ojos un líquido acuoso y mi padre me llevó donde su amigo oftalmólogo Dr. Verdaguer (bisabuelo) en un día sábado en su consulta me puso en una maquina frente a él y observó de inmediato empezó a retar muy fuerte a mi padre que era un irresponsable con su hija, “como no la llevaste al oftalmólogo tu hija tiene un astigmatismo severo”; mi papá trataba de explicarle que me habían llevado y el médico dijo que todo estaba bien. Ahí me pusieron lentes ópticos y me cambió la vida ya las letras en el libro no se movían y ahora por mucho tiempo cuando voy a la ducha me saco los lentes luego de ordenar antes cual es el shampoo y el bálsamo después me los saco. Una vez sin lentes estábamos esperando la micro a la salida de la universidad con varias compañeras y les dije allá viene la micro…. todos se quedaron alerta sacaron el dinero y el pase escolar pero cuando empezó acercarse la movilización me di cuenta que no era la micro sino era un camión, me hicieron bastante burla y algunas se enojaron conmigo. También al cantar en Cafh en Fa sostenido para mí se hace muy difícil pero no imposible ya que siento desde lo más profundo de mi alma al iniciar ese himno, una fuerza interior que fluye sola porque en lo más íntimo está esa energía interior  desde el alma, acompañada del corazón: esa unión es muy hermosa y con mucha energía. 

Referente al aspecto tecnológico tengo serias dificultades de mucho miedo, esto ocurrió en mi trabajo en la escuela de sordos, trabajé del año 78 hasta el 2020; tuve un Director que siempre tuvimos distancia, percibía que no era grata para él, siempre me daba mayor trabajo y yo lo aceptaba, en una oportunidad hubo muchos colegas que no fueron a trabajar y recibí alumnos de cinco cursos incluyendo el mío. De una colega había un niño, de otro curso tres alumnos y así tenía que llenar cinco leccionarios y por la diversidad de los cursos no podía equivocarme, más aún si un curso era de la pareja de él que a pesar de haber estudiado junto a la colega en la universidad era muy deferente a mí. Ese día luego de tocar la campana se retiraron los alumnos de los cinco cursos me quede en la sala descansando antes de escribir los libros, pasaron diez minutos golpean la puerta de mi sala y era el Director para decirme mirando su reloj: “Uchy han pasado ya diez minutos y debes irte ya “; a lo cual le respondo: “Director he atendido cinco cursos, quedé muy agotada porque eran muy diferentes y déjame descansar un rato porque no quiero equivocarme en los leccionarios”. Me mira y sin decir nada se retiró.

En otra oportunidad estábamos en Computación todos los profesores, trataba de aprender el manejo del computador sin tener uno en casa, nos habían hecho tres cursos de computación para manejar los computadores, estaba yo tranquila y de pronto se acerca el Director diciéndome: “Oye Uchy tú tienes que tener mucho cuidado porque si aprietas una tecla mal el computador se echa a perder”. Desde ese momento me quedó muy grabado en el chip lo que él me dijo como jefe, y cada vez que tenía que trabajar con todo mi curso en la hora de computación estaba muy tensa. En algunas ocasiones cuando algún alumno tenía alguna dificultad con el computador y debía solucionar el problema llegaba a transpirar pensando en lo que me había dicho el jefe. Luego pasaron los años y una vez por semana debía ir con los alumnos a la sala de computación pero ahora había un joven auxiliar que le habían asignado estar en esta sala porque manejaba bastante bien los computadores y así podía ayudar a los profesores y alumnos. Un día pasó algo en el computador de un alumno, me acerqué para ayudarlo y le digo al auxiliar hay que tener mucho cuidado porque si uno aprieta una tecla se puede echar a perder el computador y la escuela tiene que llamar al técnico para que venga a arreglarlo. El auxiliar me dice: “¿De dónde sacó eso profesora Uchy?, ¿Quién le dijo eso?” Él estaba muy sorprendido y le contesté: el Director me lo dijo. El auxiliar se ríe y me dice el Director está totalmente equivocado y jamás un computador se estropea porque uno aprieta mal una tecla…. eso es muy falso; es muy difícil que un computador se eche a perder por una causa así y siempre si la persona aprieta mal una tecla se arregla fácilmente profesora Uchy.

Entonces eso dicho por mi jefe me hizo no disfrutar por mucho tiempo del computador porque tenía mucho miedo que podía estropearlo y aún tengo una sensación de “miedo” cuando estoy frente a un computador aunque sea el que tengo en mi casa. Lo mismo me ocurre con el celular, el televisor y con toda la tecnología porque no tengo la seguridad de poder arreglarlo.

Además con el pasar de los años el alma presenta otras falencias que hay que tener muy presentes, una de ellas es en cuanto a la pérdida de la memoria que aunque sea paulatina interfiere en el alma porque no recuerda como lo hacía antes; a veces uno guarda algo porque luego lo va a ocupar, queda muy bien guardado y cuando lo requiere no se acuerda nunca donde lo guardo por más que piense en ello; esto produce al alma un “bajoneo” que es de acuerdo a la edad y que tenemos que aceptarlo viviendo con ello.

Cuando el alma tiene que aprehender algo nuevo, se concentra totalmente para no fallar en ese aprendizaje pero a veces se da cuenta el alma que adquirió ese conocimiento nuevo sin problema, pero luego cuando lo necesita no lo recuerda ese nuevo que aprendió; también influye lo vivido por el estallido social y la pandemia porque el alma tiene que estar consciente que a pesar de estar alerta en un cien por ciento por aquello que está aprendiendo le influye la situación vivida en el país, aparte que tiene que estar en casa y solo salir dos veces por semana con mucha alerta de las características propias para no contagiarse en todo momento: mascarillas, alcohol gel, guantes, distanciamiento en todo momento y eso nos hace disfrutar muy poco de la vida.

Algunos puntos que considero importantes para mejorar nuestro desenvolvimiento espiritual son: 

• Trabajar diariamente en nuestra ascética.
• Estar permanentemente con la Dirección Espiritual para ayudar en el desenvolvimiento.
• Aprender a estar en el Silencio. Observar nuestro entorno, no emitir juicios hacia otras almas, ser honestos con los planteamientos y lograr darnos cuenta de nuestras falencias para cambiarlas con el trabajo de los pares de opuestos.
• Tratar de disfrutar de las charlas dadas por el Grupo de Extensión y conocer la formación de Cafh con toda su historia sobre la vida de Santiago Bovisio, el fundador de Cafh.

 

Conclusiones

• Considero que a nivel general el alma debe tener claridad de sus aspectos positivos y sus falencias; para así trabajar en el desenvolvimiento espiritual. Esto se puede lograr con mayor claridad trabajando con los pares de opuestos, y así lograr transformar lo negativo en positivo con una buena ascética espiritual, con la mística del corazón presente y la Dirección Espiritual. La Dirección Espiritual es un gran apoyo para el alma, nos permite avanzar en este desenvolvimiento espiritual. Este cambio es lento pero lo primero es reconocerlo. Aquí es muy importante compartirlo con el director espiritual para así aprender como poder cambiarlo realmente y siempre tener muy presente: la Mística del Corazón. 
• Como almas de Cafh debemos tener claramente el camino de nuestra libertad interior y en todo momento tenerlo muy presente en la vida cotidiana, luego al hacer el examen retrospectivo analizar con el corazón lo que podemos mejorar al día siguiente de nuestro análisis interior pudiendo luego de reconocerlas tratar de cambiar aquellas que no son adecuadas. 
• Pero el alma durante su trabajo de la ascética diaria va cambiando sus falencias por aspectos más positivos, aunque algunos no lo logran en un 100% pero que lo intentan y están conscientes de ello; esto nos permite tener un acercamiento con la Divina Madre, pero dicho acercamiento en este inicio es paulatino, tal vez con el tiempo y el trabajo interior de la ascética, lectura espiritual, meditación, etc., y en especial aprendiendo a estar en silencio va observando con gran alegría una relación más profunda con la Divina Madre, y esto al alma la llena de gozo porque se fortalece y se refugia en el Amor de la Divina Madre.

Nuestra resistencia a aprender algo nuevo

(Caballero Secretario: Daniel)

 

Como dice la definición de aprender, podemos adquirir el conocimiento por medio del estudio o de la experiencia. Del estudio a través del conocimiento que han adquirido otros seres humanos y que se transmiten de generación en generación y a través de la experiencia ya sea por situaciones vividas o por la experimentación (prueba y error). Además ambos tipos de conocimiento se entremezclan en el método científico.

Nuestra resistencia a aprender algo nuevo es el juego que realiza nuestra mente para no esforzarse porque percibe que estudiar aquello será muy difícil y si agregamos a ello la cantidad de tiempo entonces a mayor tiempo mayor oposición. Por lo tanto lo más fácil y cómodo es estudiar algo de algunos meses o un año o incluso no aprender algo nuevo, porque donde me encuentro estoy bien. Junto a esto se presentan ciertos temas del conocimiento que no son más afines ya sea porque nos gustan más o son áreas del conocimiento que ya hemos estudiado y las comprendemos mejor. En cambio hay otras áreas del conocimiento que no son tan desconocidas por nosotros y donde no nos manejamos mucho y eso nos produce una mayor incertidumbre y con ello las percibimos como difíciles (resistencia a aprenderlas). Por lo tanto cuando debemos aprender algo nuevo tratamos de enfocarnos y de profundizar en las áreas del conocimiento que ya hemos estudiado y comprendido (el espacio conocido).

Por otro lado según sea nuestra actividad laboral, y debido a los nuevos avances en esa especialidad o área del conocimiento, se nos exigirá estar permanentemente especializándonos para no quedar fuera del nuevo conocimiento. Esto sumado a la exigencia laboral diaria más el tiempo dedicado a las actividades familiares y al tiempo de descanso, hace que el tiempo disponible para aprender algo fuera de nuestro ámbito de conocimiento sea reducido. Si a lo anterior le sumamos que tenemos una mala organización de nuestro tiempo diario o también un exceso de compromisos y actividades que deseamos hacer (encrucijada entre lo que tengo que hacer en un día y lo que realmente puedo hacer en ese día), entonces ya no existe la posibilidad de aprender algo nuevo. 

Nuestra mente tiene la tendencia a querer hacer lo que disfruto o lo que me gusta hacer, pero cuando debo aprender a hacer algo que clasifico como desagradable o que no me gusta (limpiar el baño), la tendencia mental es a verlo en forma negativa o de rechazo. Y si estoy obligado a hacerlo, lo realizo pensando en otra cosa para no sentir desagrado, por lo cual no estaré prestando toda mi atención en lo que estoy haciendo y por ende el trabajo no será muy satisfactorio.

Para poder encontrar la respuesta a nuestra propia resistencia a aprender o hacer algo nuevo, debemos encontrar cual es el origen de nuestra resistencia, porque este cuestionamiento nos llevará a descubrir de donde proviene o que provoca esta resistencia o incluso rechazo, para ello debemos realizar lo que hemos aprehendido en Cafh: buscar primero nuestra detención de los pensamientos y con ello la calma de nuestras emociones, para que así le demos espacio a la paz y tranquilidad a nuestra comprensión para escuchar nuestro interior.

Algunos de los motivos que pueden originar esta resistencia a aprender o hacer algo nuevo pueden llegar a ser:

• Culturalmente se niega o resiste a un nuevo conocimiento, por creencias, ideologías o religiones que traspasan de una generación a otras sus tendencias.
• Que haya tenido una mala experiencia cuando quise o estuve aprendiendo/haciendo algo nuevo (condicionamiento)
• Porque no es de mi ámbito de conocimiento o lo que hago normalmente
• Porque nunca lo he hecho
• Porque eso lo hacen las/los mujeres/hombres
• Porque no tengo tiempo
• Porque no me gusta aprender o hacer eso
• A mi edad, etc.

 

Si bien puede haber más de una causa que nos lleva a resistirnos a aprender algo nuevo, somos nosotros mismos los que tenemos las herramientas para descubrirlo. 

 

El conocimiento siempre suma. 

En variadas circunstancias nos vemos enfrentados a una problemática de la cual no podemos encontrar nosotros solos su solución. Necesitamos que otros nos puedan ayudar a encontrarla porque no poseemos todo el conocimiento necesario para su solución o requerimos ver el problema desde otros puntos de vista. Esto es muy común en las problemáticas laborales, en donde se realizan reuniones interdisciplinarias, es decir reunión de expertos en diferentes áreas del conocimiento para encontrar la mejor solución. Esto es también aplicable a problemas más simples que tenemos por ejemplo en nuestro hogar donde si se rompe una tubería de agua o no funciona la llave del lavaplatos, o se genera un corto circuito eléctrico, etc., muchas veces no sabemos qué debemos hacer para mitigar el problema. Y posteriormente revisamos si tenemos alguna idea de donde se produjo el problema para poder solucionarlo. La mayoría de las soluciones que tenemos en nuestro hogar son de fácil solución pero si no tenemos los conocimientos no sabremos cómo realizarlo. Cuando el problema no es tan fácil de solucionar, entonces debemos recurrir a un especialista.

Los diferentes conocimientos que hemos aprendido los interrelacionamos, por lo cual lo que estudio hoy y no lo aplico inmediatamente, es muy probable que ese conocimiento lo interrelacione en otras actividades las cuales no tienen relación directa con aquella área del conocimiento que estudié en algún momento. 

El aprender algo nuevo me permite explorar otras áreas del conocimiento para crear algo nuevo, como también para salir y comprender mi ignorancia sobre el tema y cambiar con ello mis juicios, prejuicios, etc. Por ejemplo un chef de cocina, quien se especializa en una o varios tipos de cocina, pero el chef no solo quiere hacer los platos que ha aprendido a cocinar, sino que además está preparado para producir nuevos platos de comida, mezclando otros ingredientes, cuyos aromas y sabores sean del gusto de sus clientes y con ello la preferencia de los clientes a su local o restaurante.

Respecto del desenvolvimiento espiritual es importante estar permanentemente realizando la lectura de las enseñanzas y de la lectura espiritual y sobre todo el mayor de los aprendizajes está en las experiencias diarias, donde podemos ir aplicando lo aprendido a través de la observación en la forma en que nos relacionamos con las otras almas, la forma en que nos comunicamos tanto verbal como en nuestros gestos. La intención con la que realizamos nuestras actividades diarias, es decir como estamos usando nuestra energía día a día, en forma egoísta o en forma generosa, solo para mí mismo y nada o casi nada para los demás. Ese es el mayor aprendizaje que tenemos como hijos de Cafh, para producir en nosotros esa transformación que andamos buscando.

 

Conclusiones

• Nunca es tarde para aprender, la mayor parte de las veces somos nosotros mismos quienes nos limitamos ya sea por condicionamientos, porque no sé nada de eso, porque no me gusta hacer eso, etc. Lo único que nos puede limitar es una enfermedad que nos lo impida.
• En muchas ocasiones nuestra propia estructura mental juega en contra de nosotros mismos, limitando nuestro desarrollo.
• Los seres humanos interrelacionamos el conocimiento por lo que la suma de dos mas dos es mayor a cuatro.
• Nuestro trabajo como hijos de Cafh es estar diariamente aprendiendo de nosotros mismos para mejorar y avanzar en nuestro desenvolvimiento espiritual.